martes, 26 de octubre de 2021

Mujer sentada. Escultura en Oviedo.

Obra de Manuel Martínez Hugué, luce en la calle San Francisco desde 1996.

Oviedo, tercera capital del reino de Asturias, y por tanto en su momento de España, ostenta la capitalidad del Principado de Asturias, estando ubicado en el centro neurálgico del mismo. Vertebrado en 30 parroquias, su extensión es de 186,15 kilómetros cuadrados, se encuentra a una altitud de 227 metros sobre el nivel del mar, resguardado por el monte Naranco al norte, y la sierra del Aramo al sur, y su censo poblacional es de 220.406 habitantes –censo de 2020-.

Ciudad repleta de magia, la vieja dama del norte de España renueva cada día su encanto. Si algo la define es el exquisito cuidado de todos sus rincones. Visitarla y recorrerla es una aventura apasionante, la alta peatonalización de sus calles –tanto del centro como de barrios- permite al visitante el disfrute de parques, edificios, plazas, esculturas, fuentes, rincones y sobre todo gentes, y todo ello enmarcado en una máxima limpieza que le ha valido para ser galardonada en diferentes ocasiones como la ciudad más limpia de España.

Moderna y vital, pero repleta de historia, sus doce siglos de historia le permiten atesorar un patrimonio artístico como pocas ciudades españolas. Sus íconos monumentos del arte prerrománico, declarados Patrimonio de la Humanidad, se complementan con múltiples edificios civiles y religiosos, como la Catedral, componiendo un paisaje urbano al que complementa monumentos conmemorativos y esculturas.




Paisaje que se ha visto incrementado notablemente en las dos últimas décadas, debido al auge de esculturas que proliferan por todos sus rincones. Más de ciento cincuenta esculturas y monumentos, muchas en tamaño natural a píe de calle,  la convierten en un museo abierto e interactivo las veinticuatro horas, símbolos inmortales y representativos de la ciudad, susceptibles de ser tocadas, abrazadas y fotografiadas.




En la parte superior de la calle San Francisco, lindante con la de Ramón y Cajal, a escasos metros de la esquina superior del edificio histórico de la Universidad de Oviedo inaugurado un 21 de septiembre de 1608, luce la escultura denominada MUJER SENTADA.




Obra del escultor barcelonés Manuel Martínez Hugué (1872-1945), datada en el año 1930, y que fue colocada en su ubicación actual en febrero de 1996, con efemérides de las obras de remodelación de varias calles del casco histórico de la ciudad.




Realizada en bronce, luce sobre un pedestal de piedra, muestra una mujer sentada en una forma un tanto particular, con una pierna hacia arriba y la otra ligeramente apoyada en el suelo, con un brazo a su espalda y el otro apoyado sobre su pierna derecha, con su cabeza ligeramente girada. Marcada con las connotaciones técnicas del artista, como son sus formas redondeadas y las texturas rugosas.




MÁS INFORMACIÓN COMPLEMENTARIA. Pinchar enlaces.

CATEDRAL DE SAN SALVADOR.

ESCULTURAS Y MONUMENTOS EN OVIEDO Y SUS AUTORES.

OTROS.



“Pensar es a los hombres, como volar a los pájaros”. Albert Einstein (1879-1955) físico y matemático alemán, premio Nobel de Física. 


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