martes, 18 de agosto de 2020

Monumento a Severo Ochoa de Albornoz, en Luarca.

Erigido en la céntrica plaza Alfonso X el Sabio, obra de Sara Iglesias Poli, con motivo del 25 aniversario de su fallecimiento.

Luarca es la capital del occidental concejo asturiano de Valdés, parroquia y localidad que cuenta con un censo poblacional de 4937 personas –censo de 2019- ha sido a lo largo de la historia el puerto más importante del occidente asturiano y uno de los más importantes del Principado de Asturias. La villa, llamada también “La villa blanca de la costa verde”, ha crecido urbanísticamente entorno a su puerto y está vertebrada por el río Negro, que desemboca en una de sus tres playas.

Uno de los hijos ilustres y Predilecto de Valdés es Severo Ochoa de Albornoz, nacido en la villa el 24 de septiembre de 1905. Médico y científico, que a la muerte de su padre, con siete años, se fue a vivir a Málaga, residiendo posteriormente en Madrid y diferentes países antes de asentarse en Estados Unidos, dónde se nacionalizo en 1956 renunciando a la española. Ejerció la investigación en las universidades de Washington y Nueva York, recibiendo multitud de reconocimientos y premios, entre el de doctor honoris causa por la Universidad de Oviedo en 1967 y el más importante el Premio Nobel de Medicina en 1959 por sus importantes trabajos en Bioquímica.



En 1985 volvió a vivir a España, falleciendo en Madrid el 1 de noviembre de 1993. Ligado siempre a la villa que le vio nacer, periódicamente volvía a ella dónde la familia tenía en el pueblo de Villar la casona familiar de finales del siglo XIX denominada Villa Carmen, en honor a su madre.

Sus restos descansan siguiendo su voluntad en el vistoso cementerio parroquial sito en el bario marinero del Cambaral, en un panteón dominando el mar Cantábrico y las playas de Luarca, junto a su compañera, bastión y cónyuge Carmen García Cobián, fallecida 6 años antes. En la lápida del panteón se puede leer el epitafio que el mismo Severo redacto en vida, y que resume lo que ella significó para él: "Aquí yacen Carmen y Severo Ochoa unidos toda una vida por el amor y ahora eternamente vinculados por la muerte".. 



En el centro neurálgico de la villa, la plaza Alfonso X el Sabio, dónde también se ubica el consistorial valdesano y el popular kiosco de la música, se encuentra la casa o palacio de los marqueses de Gamoneda. Construcción señorial urbana edificada en el siglo XVIII en estilo barroco, por iniciativa de
  Juan Antonio Pérez Gamoneda y Casco Villademoros, secretario del monarca Carlos III de España, quien le concedió el título de marqués en 1765.

En el extremo izquierdo de ella, cuyas dependencias alberga la oficina de turismo municipal y acoge una exposición permanente sobre la vida y obra del ilustre valdesano, luce desde el 15 de noviembre de 2018 el monumento con el que el municipio le quiere hacer “eterno”.




Su realización se ha englobado en los actos organizados con motivo del veinticinco aniversario de su fallecimiento, que bajo el título “Luarca, villa de Nobel” abarcó diferentes actos. Entre ellos el dar su nombre a la calle, hasta ese momento llamada paseo San Juan, en Villar, dónde se ubica la casa familiar.

Obra realizada por la escultora ovetense Sara Iglesias Poli, quien le plasmó a tamaño natural en estilo impresionista vestido con traje y corbata con un gesto que refleja la escucha y la serenidad. Escultura moldeada en barro y fundida en bronce a la cera perdida en los talleres madrileños Bronces Artísticos, que supuso una inversión de 18.000 euros al consistorio valdesano.




Situada a nivel de la calle, sin pedestal alguno, a cuyos píes luce una placa con la inscripción “El Ayuntamiento de Valdés a nuestro hijo ilustre Nobel, Severo Ochoa de Albornoz, en el XV aniversario de su fallecimiento. Luarca 15 de noviembre de 2018. Escultora Sara Iglesias Poli”.




MÁS INFORMACIÓN COMPLEMENTARIA. Pinchar en enlaces.

Un Principado para descubrir.

 CERTAMEN DE CAMELIAS.

Certamen de camelias Villa de Luarca. IV edición. 2019. Pregón de Luis Javier Del Valle.


DESCENSO ECOLÓGIO DEL RÍO ESVA.


FIESTAS Y SIMILARES.


JARDINES DE LA FONTE BAIXA.


MUSEOS, PLAYAS y OTROS DE INTERÉS.
Capilla de la Virgen Blanca, en la Atalaya, Luarca.

Cementerio de Luarca.
Museo rural etnográfico de Luarca.

“La ciencia siempre vale la pena porque sus descubrimientos, tarde o temprano, siempre se aplican”. Severo Ochoa de Albornoz (1905-1993) médico e investigador asturiano.


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