Es uno de los platos más típicos de la gastronomía tunecina.
La gastronomía tunecina es muy rica y
variada, es el resultado de una mezcla de combinaciones de los culinarios
locales y las contribuciones y especialidades procedentes de los distintos
pueblos que han ocupado su territorio a lo largo de los tiempos.
Influencias bereberes, judías, persas,
turcas, andaluzas, francesas, italianas, que con sus influencias han
enriquecido los platos tunecinos, llenos de sabores únicos y peculiares.
La gastronomía tunecina.
La gastronomía tunecina.
Uno de los platos más tradicionales, y
todo un clásico de la cocina tunecina, son los briks, que forman parte de los
entrantes que se degustan habitualmente.
Pero no sólo forma parte de su tradición
culinaria, está intrínsicamente ligado a la cultura del pueblo tunecino, al ser
el plato que se ofrece al novio en la casa de su futura esposa. Existiendo la
creencia de que según se coma el brick –siempre con las manos- en función de
las gotas de huevo con su yema líquida derrame, así tratará a la novia en su
vida de casados.
El briks realmente es una especie de
empanada, que se prepara con un hojaldre fino que se elabora con una harina
conocida como maluska, que se fríe en aceite de oliva y se rellena con
diferentes productos, tanto salados como verduras, carne picada, pollo, marisco
o atún, y que se sirve caliente con rodajas de limón, como dulces con frutos
secos y miel.
De todos ellos, el “Brik de oueft” el
brik de huevo y atún es el más popular de todos ellos.
Los ingredientes del mismo son: la oblea
o hoja de hojaldre fino, que se venden ya elaboradas; la harissa, una de las
salsas más populares del país, realizada a base de pimientos molidos, ajos y
carvi –una especie de comino-; perejil; atún en conserva; alcaparras y huevo de
gallina crudo.
Los pasos de su elaboración, son:
1.- Se estira bien la oblea.
2.- Se estira una base fina de harissa
sobre la misma.
3.- Sobre ella se pone el atún en
conserva desmigado.
4.- Se espolvorea todo ello con orégano
y romero.
5.- Se esparcen unas alcaparras sobre el
atún.
6.- Y sobre ello, en el centro, se abre
un huevo crudo de gallina, con cuidado de que no se rompa la yema.
7.- Se dobla un borde de la oblea hacia
el centro, y desde el centro al borde opuesto, de forma que queda como una
empanadilla o saco, sin que se rompa la yema del huevo. Sellar las hojas con un
poco de agua.
8.- Freír en aceite de oliva bien
caliente, durante 2-3 minutos por cada lado, hasta que quede bien dorado.
9.- Sacar y dejar que reposar sobre una
estructura o papel absorbente, para quitarle el exceso de aceite.
10.- Servir acompañado con unas rodajas
de limón.
Receta del brik en árabe.
OBSERVACIONES:
Degustado en un puesto exterior en el mercado de Houmt Souk, la capital de la isla de Djerba.
MÁS
INFORMACIÓN COMPLEMENTARIA. Pinchar en enlaces.
“A
mi estómago poco le importa la inmortalidad”. Christian Johann Heinrich Heine (1797-1856) poeta y
ensayista alemán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario