martes, 11 de agosto de 2020

Escultura al gochu en Noreña, seña de hermanamiento con Burgo de Osma.

Donada por el empresario Gil Martínez Soto, de Burgo de Osma, localidad soriana hermanada con la villa condal.

Noreña es un concejo y villa situado en el centro neurálgico del Principado de Asturias, distante 15 kilómetros de su capital, que aúna una serie de peculiaridades. Es el más pequeño de los 78 existentes y uno de los más pequeños de España, con una superficie de 5,29 kilómetros cuadrados. Está formado por cinco porciones de territorio separadas y repartidas como un archipiélago por el concejo de Siero, repartidas en tres parroquias, con un censo poblacional en 2019  de 5179 habitantes, lo que le convierte en el de mayor densidad de Asturias, como también fue en sus años el de mayor PIB del Principado. Y es el único de la Comunidad con el título de Condado, otorgado por Juan I en 1383 al obispo de Oviedo Gutiérre de Toledo, a la vez que lo separaba del concejo de Siero, exhibiendo los obispos de Oviedo sus atributos como condes hasta 1954, siendo el último Javier Lauzurica y Torralba, por lo que es conocida como la villa condal.

Históricamente desde tiempos inmemoriales  el sustento económico del concejo estuvo en dos gremios, el de zapateros y el de chacineros. La primera documentación escrita sobre la existencia de chacineros data de 1799, industria que tuvo un importante crecimiento a finales del siglo XIX y principios del XX, coincidiendo con la decadencia de la del calzado, con más de 114 industriales censados. Actividad que sigue siendo en la actualidad industrial más importante.




El Burgo de Osma, es un municipio y ciudad situado en el occidente de la provincia de Soria, con una población de 4940 habitantes (censo 2019) muy similar a la de Noreña, en el que la actividad chacinera es también su principal industria.

Al año de creación de la Asociación y Cofradía de los Caballeros de la Orden del Sabadiego, en 1989 está recibió la invitación para participar  en las “Jornadas rito-gastronómicas de la matanza”, que se celebran en el Burgo desde 1974, por iniciativa de la familia Martínez Soto, empresario del hotel y restaurante Virrey Palafox, declaradas Fiestas de Interés Turístico Nacional.




De aquella visita surgió la posibilidad de realizar un hermanamiento entre ambas poblaciones en base a la tradición chacinera de ambas, haciendo la Orden de intermediarios entre ambos consistorios. El resultado fue fructífero y al año siguiente, en febrero de 1990 una amplia delegación noreñense encabezada por su alcalde Aurelio Quirós y los Caballeros de la Orden, se desplazo a tierras sorianas realizándose el hermanamiento entre ambas.

Desde entonces los encuentros entre vecinos y colectivos de estos municipios chacineros han sido constantes. En abril de 2019, con motivo de la celebración de la festividad de San Marcos, cuyos actos festivos en la villa condal son organizados por la Cofradía, el empresario soriano Gil Martínez Soto, quiso refrendar el hermanamiento realizado 30 años con la donación de una escultura de un gochu –cerdo-.




Escultura de granito que simboliza un gochu de píe, el animal cuya materia prima es la base de los productos elaborados en la villa condal y símbolo de su gastronomía, que se ha ubicado en la plaza de la Nozalera, metros más abajo del Monumento a los Zapateros, el otro sustento industrial ancestral del concejo.

Obra situada sobre una base circular de hierro, que en la actualidad –octubre 2020- no tiene ninguna placa ni mención a su autor, donación o hermanamiento.

 


 


“A quien no mata puerco, no le dan morcillas”. Refrán español, que reconoce el esfuerzo al que trabaja.

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