martes, 23 de enero de 2018

Certamen del quesu d´Afuega´l Pitu, XXXVIII edición. Pregón de Manolo Linares

Impartido el 21 de enero de 2018 en La Foz de Morcín, con motivo de la trigésima octava edición del Certamen del Quesu d´Afuega´l Pitu.

Señoras y señores y demás autoridades representantes del pueblo, que con su voto, os ha dado su confianza, quiero daros la bienvenida, a este festival que loa las bondades del “queso de Afuega’l Pitu “ en nombre de la Organización, del XXXVIII Certamen celebrado, aquí, en La Foz de Morcín, y que a través de Fernando Delgado, me han encargado que os suelte una filípica, o al menos eso es lo que esperan algunos.
Venir a la Foz, para mí, siempre es un placer, porque aquí venimos con o por los amigos, como Jama, Sariego, Marcial y otros muchos, algunos procedentes del internado en los dominicos, y como es lógico con los amigos, siempre se va de fiesta, por lo general fiesta gastronómica, cofradías de los nabos, de los quesos, de los vinos, de la mar etcétera, etcétera, y tan pronto nos encontramos con montañeses como vascos o portugueses, claro que de vez en cuando, también venimos a despedir a alguien que nos abandona y esto, en Asturias, cada día es más frecuente, tenemos una población muy envejecida y debido a esto celebramos muchos más funerales que bautizos, por ello hay que aprovechar estos buenos momentos. La Foz, al igual que otros muchos núcleos similares, en los distintos lugares de Asturias, necesitan de estas celebraciones para mantenerlos con vida; con respiración asistida, porque en cuanto termina el evento, es como si pasase el “ángel vengador”, se queda todo desolado.
Recuerdo ahora, que hace unos años, he pregonado una feria de quesos en el mes de septiembre y en este mismo lugar; yo traía escritos unos folios que se encabezaban con.., Autoridades, señoras y señores, pero de pronto se armó un gran revuelo, porque las “autoridades” esperadas no se presentaron y eso, a pesar de estar al servicio de quienes les otorgaron su confianza, por ello tuve que romper aquel pregón e improvisar ya que lo que tenía escrito poco o nada tenía que ver con la realidad. Y esto no tiene solución, demasiada gente va a la política, en nombre del servicio al pueblo y termina sirviéndose del mismo, porque han hecho de esto, una profesión, un medio de vida llegando al poder como llegaban los piratas, al abordaje y a quedarse con el botín; por eso hay que confiar en los políticos, que ante todo son personas y luchan, con gran mérito, contra viento y marea.
Acepte, una vez más. la propuesta de Fernando Delgado, - quijote soñador del Monsacro, de Morcín y de Asturias- quien tampoco dice que no a nada ni a nadie, siempre está dispuesto a colaborar con todo y por ello estoy aquí para pregonar, a los cuatro vientos, lo buenos que están los quesos de afuega el pitu, a pesar de que Rionda - otro quijote, celoso de mis acompañantes en la primera marcha a las Capillas - me amenazó con presentarse con una caja de huevos podres para tirarme, cuando lo que tenía que haber hecho, era haberlos vendido a los franceses, que últimamente andan escasos de huevos.
 Y hablando de Los Quijotes tan vinculados a La Foz, mi maestro en pregones es Emilio Serrano, quien dice que cuando falla algún pregonero lo llaman a él, porque nunca dice que no...y además pone los licores y en temas de lácteos tenemos al “Gran Maestre” de la Orden de los Quijotes, al ilustre cangues Paco Rodríguez, quien está empeñado en anexionar las tierras de Tineo a Cangas del Narcea, para recuperar el imperio de Leitariegos, equivalente a la Tabarnia asturiana, y todo esto desde que se enteró de que en Navelgas se hacía, familiarmente, el afuega el pitu, con unas pepitas de oro dentro; el oro fue motivo de la lucha por la lucha por independencia del Cuarto de los Valles, pero viendo la merma de la población, los “independentistas”, no huyeron a Bruselas, calcularon que era más práctico “refugiarse en la “Consistorial” de Tineo. El oro también ha sido causa de que los Romanos hayan ocupado estas tierras y vaciado sus montañas, pero nos dejaron aquí los castaños con sus frutos, y aunque poco se diga de ello, también los quesos, que los comían los esclavos y los tribunos y aquí nos dejaron sus recetas en donde uno de los quesos más comunes, es el que ahora conocemos como afuega el pitu.
Echo de menos en La Foz a José Manuel, y los potes de Estrella, que nos tomábamos tras, (al decir del montañero Rionda ), hacer una ruta corta y por llano, lo que resultó ser una hora y media caminando por el monte Llusorio y con unas subidas y bajadas como las del Angliru, todo un tanto accidentado, lo que permitió comer el pote con gran apetito, rematando con afuega el pitu y un chupito de los Serranos; ahora también se echa de menos a Nicanor, desterrado en Gijón y como no la ausencia de Rufino Roces y a Ramón Colao, todos ellos amantes de los buenos quesos, y con estos compañeros de aventuras se experimentó el afuega el pitu blanco con un licor de manzana ( de los Serranos ), que al decir de un viejo amigo, crítico de arte en Madrid, eso hace un buen casorio.
 Pensé en la posibilidad de hacer el pregón telemáticamente, ¡ Morciniegos, focetanos y pueblos circunvecinos, “Ya tou aquí” !, aunque la fórmula no me convenció mucho, para eso está Puigdemont, y por ello me voy a cernir a la tradición, aun a riesgo , de no ser detenido pero que Juan Rionda me tire los huevos.
Asturias es una región maravillosa que no deja de deslumbrarnos a pesar del abandono al que la sometemos, en esta tierra se han dado las más curiosas situaciones; hace unos años teníamos un pòpular crítico de música que apenas oía y un experto en arte que apenas veía y aquí tenemos un pueblo, que sin tener producción de queso, ( exceptuando un corto espacio de tiempo en que se creó una quesería ) ha sido el gran púlpito para pregonar y comercializar esta noble mercancía que está alcanzando las más altas cotas de popularidad y todo gracias a unos entusiastas vecinos que no paran de estrujarse el cerebro para buscar alternativas a la decadencia de esta comarca, que alcanzó, como otras muchas cuencas de Asturias la más alta dinámica laboral en la minería, y ahora, como alternativas nos valen los nabos o el afuega el pitu y a esto le sumaremos también la maravillosa ruta del Monsacro y sus capillas, de gran atractivo turístico en donde mezclamos la historia con una maravillosa naturaleza.
El afuega el pitu es para Asturias, como los hórreos, las paneras o la fabada, aunque el queso es más antiguo que ésta; el queso fresco producto de las cuajadas familiares ha sido siempre una base del sustento en los hogares de esta tierra; las viejas cerámicas de Llamas del Mouro, tenían una vasija especial para echar el cuajo y que fuese soltando el suero, en mi casa se usaba y también unos paños de lino fino fabricados en los telares de la zona.
En el origen de la familia de Federico Engels, menciona la evolución de la barbarie, basado en los estudios indígenas del antropólogo Morgan, en tres estados, el inferior, el medio y el superior; en el inferior se domesticaron los animales y se cultivaron los cereales y se practicaba el ordeño con lo cual ahí empezaron los quesos y por supuesto durante muchos siglos los quesos eran de pasta fresca porque cuando algo se cuajaba lo aprovechaban convirtiéndolo un queso elemental dejándolo en unas hojas de higuera o berzas para que fuesen expulsando el suero sobrante, claro que ahora corremos el peligro de volver al estado salvaje, anterior a la barbarie, porque se pretende impedir el ordeño, por considerar a este como maltrato animal, esperemos que no surja el espíritu de protección del alma de los vegetales, y ya nos vemos viviendo del aire contaminado… o del cuento, que de este ya viven unos cuantos.
Al margen de todo, yo hace tiempo que vengo diciendo que hay que ponerle mucho humor a la vida, porque si no se hace tediosa e insoportable, claro que esto no implica cerrar los ojos frente a la evidencia, y la evidencia es que, por más motos que nos vendan, al final del túnel no se ve luz y para ello no hay mejor cosa que recuperar las viejas tradiciones como la del queso de afuega el pitu, que por cierto, a estos les pasa como a los vinos de Cangas, se han perfeccionado tanto que es una delicia beberlos, ya no “rascan con su amargura”, pues al queso le ocurre lo mismo, se ha alcanzado tal textura en su elaboración...que ya no se forma “la bola en el garguelo”, ahora se degusta placenteramente, con una especial textura para el paladar de los Dioses.
La caseína, derivada de la leche se ha usado como aglutinante de pigmentos, junto a la clara de huevo, para pintar al temple, o para preparar la base de los panes de oro por ello el arte y el queso de afuega el pitu, se han llevado siempre bien y en este momento que la sociedad vive tan convulsa, la caseína de afuega el pitu, nos sirve de aglutinante de los pueblos, como está sucediendo en las convocatorias de La Foz.  
Y mientras llega la prohibición del ordeño. las queserías de afuega el pitu, podrán probar a experimentar nuevos tipos de quesos frescos con la incorporación de frutos secos autóctonos a la vez que nos olvidamos de las subvenciones, cosa distinta es el contar con ayudas para el desarrollo con un control y no a fondo perdido. Será este un gran estímulo para épocas de “vacas flacas”, enfrentándonos a una realidad de una región en donde todo se vuelve montaraz por pérdida de .población. Hoy me encontré con la grata sorpresa de que la denominación, Tierras de Tineo, varias veces premiado, hace ya, un rulo de afuega el pitu con arándanos y esto, es solo el principio.
Dicho esto, para terminar cerraré con una poesía de Crucita Torre, a la vez que felicito a los premiados en el presente Certamen con la caseína aglutinando a Salas, Grao, Tineo y Cangas.

“Es bucólico su origen,
campesino y ganadero,
mil églogas son escasas,
para cantar en sus versos,
tanta poesía, tanto arte,
como se encierra en un queso”.









OBSERVACIONES: Publicado por gentileza de la Hermandad de la Probe.


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