domingo, 24 de septiembre de 2023

Fiestas de la Virgen de los Remedios 2023 en San Vicente de la Sonsierra, La Rioja.

Celebradas del 7 al 12 de septiembre de 2023, y disfrutadas por la gentil invitación del matrimonio Saez-Pelayo.

La riojana villa de San Vicente de la Sonsierra, ubicada en la comarca de la Rioja Alta, ha celebrado sus fiestas patronales en honor a su Virgen de los Remedios desde el día 7 hasta el 12 de septiembre de 2023.




Que su población y visitantes han vivido con un amplio programa festivo para todos los públicos, con actos continuos en las que se alternan actividades lúdicas y religiosas con otras sociales y ancladas en las tradiciones. Fiestas que hemos podido conocer y disfrutar gracias a la gentileza de los amigos José María Saez –oriundo de la localidad- y su cónyuge María José Pelayo.




Su comienzo fue el jueves 7 con el pregón y el lanzamiento del cohete anunciador en el epicentro festivo, la plaza del Ayuntamiento. En cuyo edificio consistorial del siglo XVII luce encima de su escudo el distintivo “Villa Divisera”, relacionado con su pertenencia a los reinos de Navarra, cuyo rey Sancho VI el otorgo su fuero en 1172, hasta que en 1463 paso a poder del de Castilla, siendo durante décadas lugar divisorio y de enfrentamientos.





Día, en el que como el resto, los actos y cultos en la Basílica de Nuestra Señora de la Virgen de los Remedios del siglo XVIII se sucedieron, con misas, novena y salves. En especial el día grande, el viernes 8, con la celebración de su Misa solemne y su procesión por el pueblo.






Una de las peculiares y exitosas tradiciones es la “Quema del toro de fuego”, que cada día hizo disfrutar en dos pases a pequeños y mayores, en la que un hombre a hombros con su estructura toril metálica emite chispas haciendo las mayores diabluras posibles entre la gente.





Sin apenas descanso, las charangas y los más animados recorren a primera hora de la mañana las calles con su Diana, anunciando el día festivo a unos vecinos que les compensan con un socorrido almuerzo, como por ejemplo hicieron los del “barrio bajo” con sus sopas de ajo.




Y es que en San Vicente, como otras localidades, no se entienden las fiestas sin el binomio comida-bebida, y así cada día barrios y calles agasajan a romeros por gentileza de vecinos,  Sociedades, colectivos, empresas y establecimientos comerciales con degustaciones de lo más variado, muchas con un fin benéfico social como muestra de su compromiso ciudadano.




Sirvan de ejemplo las degustaciones de embutido de caza, huevos con chorizo,  bocadillos de panceta y pimientos, chistorra, tortillas de patata, preñaos o palomitas, de las que se dan buena cuenta acompañadas del excelso vino elaborado en el municipio con mayor producción por habitante de la DOP Rioja.




Actividad viticultura y elaboradora que es su gran sustento económico, con más de 30 kilómetros cuadrados de viñedo –equivalente a casi una tercera parte de su superficie- y 27 bodegas acogidas a la DOP Rioja, que son sus mejores embajadores.

Alto número de productores y de aún más numeroso abanico de elaboraciones comercializadas, de las que en un mínimo número pudimos disfrutar en la ruta doble diaria de visitas a los establecimientos de hostelería marcada por nuestros anfitriones.



Tránsitos por las calles monumentales de un pueblo de apenas mil habitantes que luce orgulloso su pasado medieval, en el que estaba estructurado en seis barrios, con importantes palacios y casas solariegas edificadas en sillería entre los siglos XVI y XVIII, en cuyas fachadas lucen espléndidos escudos familiares.




Como por ejemplo las de los Balda; Davalillo; Davalillo-Crespo; Díaz de Medina y Espinosa; Gil Agiriano; Mendoza; López Cano; Olarte o Ramírez de Piscina. U otros más modernos como el de los exitosos bodegueros Eguren, o edificaciones religiosas como la iglesia de San Roque.









Aceptando gustosos los invitados la propuesta para pisar y conocer algún viñedo y la bodega familiar y el método de elaboración de maceración carbónica que aplica en su lago para obtener sus elaboraciones Vicente Martínez, propietario de Bodegas y Viñedos Manael, el más tradicional y extensivo en la comarca que le han dado fama nacional, y que nos ha permitido profundizar en su conocimiento.







El folklore y la música comarcal y regional estuvieron muy presente con las actuaciones del Grupo de Danza Sonsierra y de los de jotas Acordes Navarros y Charango. Al igual que los más pequeños disfrutaron de lo lindo con sus “toricos”, las fiestas de la espuma y de las de disfraces.





Llamativo nos resultaron las sesiones en la tarde noche del Bingo popular con enorme aceptación, organizadas por el Grupo de Danzas Sonsierra y la peña El Corquete Rojiblanco.




Las verbenas diarias, con actuaciones de las orquestas Insignia, Onda Futura, Tucán Brass, Macro Albaxera y Krossko, y las de los DJ Mendoza y Peju, hicieron las delicias de los jóvenes y no tan jóvenes que abarrotaron la plaza bailando a su son.




Aunque, posiblemente, el momento más esperado enclavado en las costumbres y tradiciones de la comarca y de todo su entorno, por adolescentes y jóvenes fueron los cuatro encierros de reses bravas de la ganadería navarra Vicente Domínguez.





A la que muchos se sumaban enlazando noche y día, y que una vez almorzados en los sitios habilitados de reparto, iban para sus domicilios en busca del merecido descanso.





Actividad de la que pudimos disfrutar en directo por primera vez, y que pone de manifiesto la valentía y solidaridad de unos jóvenes en la que el disfrute y seguridad física van a la par, sin maltrato animal en ningún momento.




Festejos y actividades continuas compatibles con las visitas a sus importantes e históricos monumentos: el conjunto del castillo y la ermita y necrópolis de Santa María de la Piscina.



Formando el primero parte activa de las fiestas patronales al ser el lugar al que acuden las cuadrillas de jóvenes y mayores para realizar la última comida festiva y bajar en desfile hasta la plaza consistorial para darse el clásico chapuzón en su fuente de los patos como preámbulo del entierro de la cuba y la traca final.




Castillo fortaleza defensivo inexpugnable alzado sobre un cerro dominando el río Ebro y sus vegas, de planta arriñonada y forma semicircular irregular, testigo mudo junto con el puente medieval sobre el río de las continuas disputas entre navarros y castellanos.




Datado en el siglo XII con diferentes añadidos bajomedievales de los siglos XIII y XIV, y que en su momento fue la fortaleza navarra de mayor envergadura cercana al río.



Conjunto, en la actualidad en manifiesto deterioro aunque en reconstrucción, compuesto por tres recintos amurallados: el albacar con los restos de viviendas de los primigenios pobladores; el patio de la fortaleza con la iglesia de Santa María la Mayor y la ermita de San Juan y el castillo con sus torres del homenaje y del reloj.





Recintos visitables a excepción de la torre del reloj y la ermita. Torre que permanece íntegra aunque cerrada, datada en el siglo XVII, edificada sobre una anterior, de planta cuadrada y exenta de muralla.





Ermita construida en 1385, también denominada de la Vera Cruz al ser sede de la Cofradía de la Santa Vera Cruz de los Disciplinantes, la única existente en Europa, protagonista en Semana Santa con el acto de los “Picaos” que se remonta al año 1551. Y que en la actualidad es fruto de estudio arqueológico al descubrirse su función de panteón de diferentes enterramientos, entre ellos de un buen número de niños, como bien pudimos visionar con el permiso de los arqueólogos.





Altiva sobre la cumbre del cerro luce la torre del homenaje o mayor, datada en el año 1170 y reconstruida en el siglo XIX, de traza rectangular con tres plantas. A la que se  accede por una escalera de caracol, lo que permite disfrutar de las magníficas vistas sobre la villa y su entorno.





En el recinto amurallado se ubica la iglesia de Santa María la Mayor, edificación de estilo gótico tardío del siglo XVI, de una sola nave con cuatro tramos con sus capillas, a la que se accede por una portada barroca con arco exterior de medio punto.





En cuyo interior de tramos de bóvedas de crucería complejas, destacan su sacristía, la escalera renacentista de acceso al coro y sobre ellos el espectacular Retablo Mayor.




Datado en 1550, realizado en estilo manierista con vestigios plateresco policromado, compuesto de tres cuerpos divididos en cinco calles y cuatro entrecalles, rodeados de columnas abalaustradas y frisos decorados, que acoge un amplio abanico iconográfico de tallas de santos, profetas y apóstoles.



Visita a la maravillosa iglesia y esplendido retablo, que el que suscribe pudo disfrutar guiado por Javier Pangue, enamorado y continuo estudioso del arte de su pueblo. Quien gentilmente fue explicando las diferentes obras de arte y sus peculiaridades, con especial énfasis en un retablo que conoce en profundidad pieza a pieza y sobre el que, en contribución a sus lugareños, realizo una aplicación informática audiovisual que permite a los visitantes su descripción talla a talla.



No faltando peculiaridades, como las cabezas de los Reyes Católicos que lucen una en cada extremo del altar mayor a media altura, como muestra del poder castellano. Lo que en su momento motivo que una buena parte de los matrimonios sonsierranos se realizaran debajo de la puerta de entrada, bajo el escudo de la divisa, como muestra de rechazo a los reyes castellanos.





Si esplendida e ilustrativa fue la visita al conjunto amurallado, no lo fue menos la realizada al cercano conjunto arqueológico de Santa María de la Piscina, en la localidad de Peciña, una de las tres que componen el municipio, en la falda de la sierra del Toloño, que protege los viñedos del aire norte.





Auténtico tesoro de la comarca, felizmente recuperado parcialmente y de propiedad municipal, cuya iglesia fue construida en el siglo XII por Ramiro Sánchez en recuerdo de su participación en la primera cruzada en la que entro en Jerusalén por la puerta de la Piscina Probática.




Edificación de estilo románico de nave única, considerado el mejor ejemplo de la comunidad riojana. En cuyo ábside y presbiterio aún son visibles restos de pinturas, y cuyo altar albergaba la Virgen de los Remedios –que actualmente luce en la basílica de San Vicente- y en cuyo lugar luce una reproducción en piedra realizada por el mencionado Javier Pangue.





Ermita que conforma un conjunto arqueológico junto con los restos del poblado, actualmente en estudio en la loma sur del templo y la necrópolis escalona con tumbas talladas en roca caliza datada entre los siglos X al XIII.






Fiestas, visitas y amistad disfrutadas en una de las villas históricas españolas que aglutina historia y belleza y que sin embargo es una gran desconocida. Nuestro agradecimiento a Chema y María José por hacernos partícipes de las fiestas de su segunda tierra, así como a sus amigos Conchita, Antonio, Rosa y Miguel por su acogida.


 


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“Una amistad noble es una obra maestra a dúo”. Paul Charles Bourget (1852-1935), escritor francés.

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