jueves, 23 de mayo de 2024

El Círculo Gastronómico de los Quesos Asturianos realiza su Viaje anual del 2024 a Cantabria.

Realizado el 21 de mayo de 2024, con visitas al  Museo Manuel Arroyo, comida de confraternidad con la Cofradía del Queso de Cantabria en Suances, visita a Uniko en Torrelavega y al bosque de Secuoyas del monte Corona.

Cumpliendo uno de sus fines estatutarios el Círculo Gastronómico de los Quesos Asturianos realiza un Viaje anual con un contenido cultural, gastronómico-quesero y de confraternización con Cofradías o colectivos.




Realizándose el del año 2024 el martes, 21 de mayo, coincidiendo con la festividad en Oviedo del “martes de campo” día no laborable, que hace el noveno desde la fundación de la Cofradía en junio de 2013. Siendo Cantabria, con visitas en Santander, comida en Suances y visitas en Torrelavega y Cabezón de la Sal las localidades donde se realizaron las actividades.




Al que han asistido los círculianos Alberto Prado, Alfonso Lozano, Basilio Orejas, Javier Escobio, José Luis Corripio, José Luis Suárez, José Ramón Muñíz, Luis Javier Del Valle, Luis Miguel Suárez y Luis Riera. A los que acompañaron Alejandro, Covadonga, Elena, Estela, Julia, Maribel, María José, Pili y Verónica.




Expedición que salió de diferentes puntos y que realizó una primera parada técnica y de concentración en Unquera, para continuar ya juntos hasta el polígono de Raos en Santander, donde Laboratorios Arroyo, S.A. tiene una nave y eran esperados por Ana Arroyo, una de las hijas del fundador, así como por Miguel Ángel Díaz y Joaquín Blanco, presidente y directivo de la Cofradía del Queso de Cantabria.





Nave que en la actualidad cobija el excelso legado de “recuerdos de toda una vida” que ha dejado D. Manuel Arroyo González (1922-2010) en sus 88 años de vida dedicados a sus múltiples pasiones, muchas de ellas relacionadas con su vida profesional como en el sector lácteo. Cuyo contenido constituye el mejor Museo del Queso en España y que distribuido en doce secciones es todo un compendio de oficios artesanales y etnografía, especialmente del sector quesero.





Licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Oviedo y doctor por la Complutense de Madrid, Técnico Bromatólogo, diploma en Ingeniería Ambiental, Agente Comercial y ejemplar e innovador empresario, Arroyo fue un ilustrado que nunca abandono el estudio y la formación. Constituyendo una referencia en la formación de maestros queseros nacionales y de la promoción de los quesos españoles, en especial de los cántabros.





La colección que se pudo visualizar gracias a la gentileza de Ana, al ser no ser visitable desde su fallecimiento salvo en contadas excepciones, abarca piezas que van desde máquinas, equipos técnicos, documentos y publicaciones, a oficios artesanales etnográficos o a piezas y cartelería y útiles variados que más que un museo conforman una auténtica aula cultural.






Más de 800 piezas catalogadas –aunque su hija cree que son bastantes más- dispersas en una nave de 1.000 metros cuadrados, dividida en doce secciones en función de su contenido, que son:

1.- Sala Alquimia.





2.- Recuerdos de viajes.




3.- Materiales de laboratorio.




4.- Maquinaría antigua.




5.- Habitación pasiega y ganadería y agricultura.





6.- Sección láctea.




7.- Sala Pedro Casado. Químico, gran amigo y director de la Cooperativa lechera Sam, en Renedo de Pielagos.




8.- La bodeguca del doctor, donde se reunía la Cofradía del Queso de Cantabria.





9.- Los útiles de carpintería de Santiago Díaz.




10.- La cocina.




11.- Tyrosemiofilia, con envases y etiquetas de quesos y productos lácteos, y la




12.- Biblioteca.




De cuyo visionado se pudo disfrutar y fotografiar con todo tipo de detalles explicativos de una hija, que junto con el resto de la familia está dispuesta a transmitir el legado paterno consciente de que es un patrimonio único. Y para ello han adquirido un palacete en la avenida de los Infantes, en el Sardinero donde se ubicará, presumiblemente en 2026, el Museo Arroyo.





Concluida la primera visita, la siguiente parada fue en el barrio de Peñacastillo donde se encuentran las instalaciones productivas y de almacenamiento de Laboratorios Arroyo, SA. que acoge en una de sus salas el resto de piezas y elementos personales del doctor, entre ellos diplomas y medallas de las múltiples Cofradías Enogastronómicas que le reconocieron sus valores, esfuerzos y dedicación a las mismas.






Espacio en el que la anfitriona deleitó a los asistentes con una degustación de diferentes quesos elaborados en Cantabria, donde no faltaron las de las tres Denominaciones de Origen Protegidas con las que cuenta la Comunidad: Picón Beges-Tresviso, Nata y Quesucos de la Liébana. A la que se sumó María Arroyo, sobrina del doctor y trabajadora del centro.





A cuya conclusión se entregó a Ana y a los cofrades queseros –miembros a su vez de la Asociación del Museo- la reproducción del logo del Círculo realizado en madera y un diploma como recuerdo del paso del colectivo por las instalaciones museísticas.



Visita que se complementó con la comida de confraternidad entre representantes de la Cofradía cántabra quesera y los del Círculo, en el restaurante Mirador de Suso sito en la atalaya sita sobre la playa de los Locos en la localidad de Suances.






Malogrando un mal entendido la presencia de otros cofrades queseros, que esperaron inútilmente a la comitiva en el establecimiento de misma propiedad –Hipódromo de Suso- sito en la avenida del faro en Santander.





Concluida la amena comida con el excelso menú diseñado para la ocasión: gambas a la plancha, arroz con carrilleras y setas, bacalao con pisto y crema de queso con ciruelas, y la foto de recuerdo sobre la playa, la siguiente parada fue en Torrelavega.




Localidad donde se ubica el establecimiento de productos gourmet Uniko, propiedad de Iñaki Herrero, que cuenta con un apartado especial de comercialización de quesos. Visita cursada principalmente para el conocimiento mutuo entre Iñaki y nuestros acompañantes Alejandro y Verónica, responsables de las queserías Alejandro Casielles y Temía respectivamente.




Realizada la misma y con las despedidas de rigor con los anfitriones cántabros, una parte de los asistentes emprendieron el regreso a sus domicilios. Mientras que otros continuaron con el programa previsto, desplazándose a Udías, a mitad de camino de Cabezón de la Sal y Comillas, donde se ubica el monte Corona y su bosque de Secuoyas.



Espacio declarado Monumento Natural de Cantabria desde 2003, bien conocido por el círculiano Alfonso Lozano, uno de los mayores expertos en tratamientos madereros del país, docente de la especialidad y profesional independiente, que ejerció de guía con sus compañeros.




Árboles poco habituales en España, originales del Pacífico de los Estados Unidos, que se introdujeron en Europa en 1843 como ornamentales y que en el marco de la Ley del Plan General de Repoblación de 1926 para especies de crecimiento rápido, fueron plantados en el monte Corona en 1942 por el Patrimonio Forestal del Estado.




Conjunto considerado en la actualidad como el mayor de Europa, con una extensión de 2,5 hectáreas que cuenta con unos 850 ejemplares de Sequoia Sempervirens, de una altura media de 40 metros y un perímetro medio de los troncos de 2 metros.




Poniendo con la visita al espectacular y desconocido conjunto natural final a otro enriquecedor Viaje anual, de un colectivo que pretende en los mismos aunar convivencia, cultura y gastronomía, y que una vez más ha cumplido con los objetivos previstos en su programación para deleite de los asistentes.

 


MÁS INFORMACIÓN COMPLEMENTARIA. Pinchar en enlaces.

Círculo Gastronómico de los Quesos Asturianos.

Círculo Gastronómico de los Quesos Asturianos. Viajes y visitas.

 

“El lenguaje de la amistad no son palabras, sino significados”. Henry David Thoreau (1817-62) filósofo y escritor estadounidense.

 

 

 

 

 

 

 

 

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