sábado, 30 de enero de 2021

La Fuentona de los Arrudos y el suministro de agua a Gijón.

Desde ella se suministra el treinta por ciento del consumo de agua de la ciudad de Gijón, a través de una conducción de 59 kilómetros.

Caso es un concejo ubicado en la zona central oriental del Principado de Asturias, en la zona alta del valle del Nalón, río que nace en su territorio; limita al sur con la provincia de León, y con los concejos de Piloña, Ponga y Aller y Sobrescobio, al norte, este y oeste respectivamente.

Abarca una superficie total es de 307,94 kilómetros cuadrados, incluida íntegramente en el Parque Natural de Redes –creado en 1996- reconocido como Reserva de la Biosfera por la Unesco en el año 2001; se vértebra en 10 parroquias y cuenta con una población de 1457 habitantes según el censo de 2020.




Caleao es una de ellas y a su vez pueblo de mismo nombre, cuya superficie es de 49,97 kilómetros, está situada a 680 metros de altitud y dista 12 kilómetros de Campo de Caso, capital municipal.

Parroquia montañosa uno de sus alicientes y principales recursos son su desfiladero de los Arrudos, que forma el río que le da el nombre, con salida y llegada desde la localidad y señalizada por la Federación de montañismo de Asturias como el PR-AS-67.

El desfiladero de los Arrudos. PR-AS-67.

Poco antes de su inicio, distante 5,100 kilómetros del pueblo, se encuentra el manantial de la Fontona, situado a 1046 metros de altitud en la base de la peña la Verde, en el extremo occidental de la sierra del Corteguero, al refugio del barranco de la Robre y rodeado de hayas.




Desde este lugar dónde el arroyo Roxecu recibe las aguas de la riega la Robre, se abastece de agua a la ciudad de Gijón desde 1950. Siendo aún a fecha 2020 el treinta por ciento del agua consumida por la ciudad más habitada del Principado de Asturias procedente de este lugar.

El proyecto de suministro se realizo en el año 1926, iniciándose las obras dos años más tarde para paralizarlas en 1930, continuándose solamente desde el manantial de Perancho, en Nava hasta Gijón.

La mitad de las obras entre la Fuentona y Perancho que quedaron sin hacer se terminaron finalmente entre los años 1944 y 1948.

La longitud total de la conducción entre el manantial casín y los depósitos de Gijón es de 59 kilómetros, formada por canales cubiertos, túneles y sifones con tubería de hormigón, fundición y acero, capaz de transportar un caudal medio de 200 litros por segundo, equivalente a 700.000 litros a la hora. Caudal al que hay que sumar el caudal de 100 litros por segundo que aporta el manantial de Perancho en Nava.

El tramo desde la Fuentona a Perancho tiene un recorrido de 31,90 kilómetros, atravesando una complejo orografía a través de los concejos de Caso, Sobrescobio, Laviana, Bimenes y Nava, en la que se alternan notables ascensos con importantes bajadas hacia profundos valles.


Canalización por la sierra del Crespón, en Sobrescobio.

En su momento la canalización precisó de cerca de 16.000 metros de tuberías de fundición y de acero, con diámetros entre 350 y 400, más de 11.000 metros de canales y de cerca de 5.000 metros de túneles, suponiendo una inversión que supero los 12 millones de pesetas.


Casetas de control en las estribaciones del pico Oroxu, en la sierra de Villamayor. Nava.

El resto de la conducción, desde Perancho a Gijón, tiene un recorrido de 25,700 kilómetros compuesto por tubería de fundición y hormigón armado, con 200 metros de canales y un kilómetro de túneles, a través de los concejos de Nava, Siero y Gijón.

Central eléctrica de Perancho. Nava.



Agua que se almacenaba en Gijón en las primeras décadas de su llegada en el lugar conocido como Campinos, entre el paseo de Begoña y la plaza de San Miguel, delante de la iglesia de Begoña. Lugar donde en la actualidad luce un estante con parte de las instalaciones primigenias. 





MÁS INFORMACIÓN COMPLEMENTARIA. Pinchar en enlaces.

Central eléctrica de Perancho. Nava.

Un Principado para descubrir.

Rutas de montaña.

Rutas de montaña. Vídeoteca.

Información sobre Caso, relacionada.

Área recreativa de los Arrudos, en Caleao.





“El hombre puede creer en lo imposible, pero no creerá nunca en lo improbable”. Oscar Wilde (1856-1900) escritor irlandés

 

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