San Salvador es la única
parroquia del pequeño concejo asturiano de San Tirso de Abres, el mque tiene
una extensión de 31,41
kilómetros cuadrados, una población de 522 habitantes
–censo de 2011- y 25 núcleos de población, siendo coincidentes los límites territoriales, sus extensiones y
población de ambas entidades.
El edificio en la actualidad se encuentra muy restaurado, después de haber sufrido numerosas remodelaciones, que entre otros elementos ha desmantelado su atrio y un pequeño portal de acceso al campanario, realizado con mampostería de pizarra y cerrajería.
El sencillo edificio, cuenta con una espadaña de tres ojos, dos en las que están ubicadas las campanas y otro superior, y tiene adosado en su lateral el cementerio municipal. A la misma se accede por un pórtico al que se accede por dos arcos de medio punto, que alberga un bonito techo de madera vista sujeto por sólidas vigas también de madera, y en cuya pared frontal se ubica un escudo de armas, entre las dos puertas por las que se accede al templo.
En su interior, el templo esta divido en dos naves muy similares, separadas por tres arcos de medio punto de piedra vistos, y en cuyas cabeceras laterales se encuentran una talla de un Jesucristo con su cruz y una Virgen.
Su nave lateral está presidida por un altar de piedra del siglo XVIII, en forma de hornacina rematada en frontón clásico y que contiene una imagen de la Inmaculada Concepción del siglo XVII, en su parte superior.
En dicho altar se encuentra una talla
de la Dolorosa y un Cristo de desenclavo del siglo XVII, colocado en una urna
de cristal.
La historia narra que San Tirso
forma parte de la donación efectuada por Alfonso VII de León a la iglesia de
Oviedo, para pasar la propiedad de la mitad de su territorio en 1172 al cercano
Monasterio de Meira y que en 1579 Felipe II vendió el territorio a los vecinos,
dando cédula de jurisdicción y condición de villa.
La iglesia parroquial y la
capital municipal, se encuentran ubicadas en la localidad de El Llano, conocido
como el O Chao, en gallego-asturiano que es el habla local. A ella se llega a
través de la carretera N-640, que une Oviedo con Lugo.
Aunque sólo se dispone de un
templo parroquial, dedicado a San Salvador, la parroquia y el municipio dispone
de numerosas capillas y ermitas como las de la Inmaculada, San Francisco de
Asís, San Isidro, San José, San Juan, San Juan Bautista, San Miguel, San Roque,
Santa Apolonia, Santa Elena y la de la Virgen del Carmen.
En la fachada del templo se
encuentra una placa –de muy estética- que lo ubica en el siglo XVI, sin embargo
parece ser que su antigüedad es difícil de datar, aunque esta nunca sería antes
del siglo XIII, ya que hasta el mismo regía la directriz del Monasterio de
Meira, del que dependía parte del concejo y en concreto El Llano, de no
permitir la edificación de iglesias o capillas demasiado alejadas del centro
monástico.El edificio en la actualidad se encuentra muy restaurado, después de haber sufrido numerosas remodelaciones, que entre otros elementos ha desmantelado su atrio y un pequeño portal de acceso al campanario, realizado con mampostería de pizarra y cerrajería.
El sencillo edificio, cuenta con una espadaña de tres ojos, dos en las que están ubicadas las campanas y otro superior, y tiene adosado en su lateral el cementerio municipal. A la misma se accede por un pórtico al que se accede por dos arcos de medio punto, que alberga un bonito techo de madera vista sujeto por sólidas vigas también de madera, y en cuya pared frontal se ubica un escudo de armas, entre las dos puertas por las que se accede al templo.
Dicho escudo o blasón es de los
Condes de Altamira, ya que en un origen este era un templo condal perteneciente
al Palacio de Arroxín (O Pacio) situado a unos 100 m al noroeste de la
iglesia. Ovalado, consta de dos partes, a la izquierda tiene la cabeza de lobo
cortada de la familia Moscoso (Condes de Altamira) y a la derecha cinco
estrellas que se desconoce el linaje, si bien es de suponer que reflejará la
fusión de dos familias, una de ellas los Moscoso. Este blasón estaba situado en
la fachada oeste de la iglesia y cubierto por una pared tras una de las
ampliaciones del templo, en el año 2001 se trasladó a la fachada principal del
templo.
Cabe recordar que el territorio que hoy ocupa San Tirso de Abres estuvo bajo regencia de una trijurisdición que ejercieron durante siglos: los Condes de Altamira, el Monasterio cisterciense de Meira (provincia de Lugo) y el poder democrático del pueblo con la familia Santisso a la cabeza; cada día de San Juan, hoy fiesta patronal, se escogían democráticamente alguaciles en lo jurídico, civil y penal que gobernaban durante un año; el pueblo los escogía para posterior aprobación del monasterio y condado.
En su interior, el templo esta divido en dos naves muy similares, separadas por tres arcos de medio punto de piedra vistos, y en cuyas cabeceras laterales se encuentran una talla de un Jesucristo con su cruz y una Virgen.
No conserva retablos, su nave
central está presidida por un altar al que antecede un arco de piedra de medio
punto, y que contiene un mueble de madera que alberga diferentes imágenes en su
interior y en sus laterales, y en el que también se encuentra una pila
bautismal de piedra, con inscripción de 1759.
Su nave lateral está presidida por un altar de piedra del siglo XVIII, en forma de hornacina rematada en frontón clásico y que contiene una imagen de la Inmaculada Concepción del siglo XVII, en su parte superior.
El presbiterio contiene
diferentes tallas de religiosas, entre los que destaca una de San Roque, del
siglo XVIII, de bella factura, dorado y policromado, vestido como peregrino
jacobeo, con manto, bordón y sombrero de concha.
El templo cuenta también con una
talla que cuenta con un especial cariño por parte de los feligreses y vecinos
de San Tirso, que sufragaron el coste de la misma, obra del artesano local José
María García Bouza (O Piñeiro). Se trata de una talla de madera de castaño de
la Virgen de Covadonga, que la Asociación cultural “San Tirso del Eo” dono a la
iglesia, y que fue bendecida el 8 de septiembre de 2007, durante la celebración
del III Día de Asturias en la localidad
y que luce en el lateral derecho del arco que da acceso al altar.
MÁS INFORMACIÒN COMPLEMENTARIA. Pinchar en enlaces.
“Recordar es fácil para el que tiene memoria, olvidarse el difícil para
quien tiene corazón” .Gabriel García Márquez (1927 -) escritor colombiano,
premio Nobel de Literatura.
Hola, Luis Javier: un placer encontrar algo de San Tirso en tu página. pero, si te es posible, me gustaría que me resolvieras esta duda: dices:
ResponderEliminar"el poder democrático del pueblo con la familia Santisso a la cabeza"; ¿Puedo entender que los Santisso tuvieron algo que ver en la compra de parte del coto por los vecinos a causa de la desamortización de Felipe II? Estoy buscando información sobre esto y lo que encuentro está bastante confuso. Hay mucho dedicado a esta familia, incluso su genealogía, pero no tengo claro qué papel desempeñaban en O Chao porque, además de su palacio, no he encontrado referencias de otras posesiones. No sé si su casa de Amaído era simplemente una residencia temporal porque parece ser que no disponían de terrenos puesto que todo el valle pertenecía al monasterio de Meira, al conde de Altamira o a los vecinos.
¿Sabes tú algo de esto? Gracias
muy interesante cuanto se cuenta en esta página. Tanto que voy a ir personalmente a verlo este julio o agosto. Gracias.
ResponderEliminarUna Capilla muy bonita y muy interesante su historia. Gracias por compartirlo.
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