viernes, 24 de diciembre de 2021

Iglesia de Sancti Spiritus, testigo de la historia de Melide.

Fundada por los Franciscanos Tercianos en 1375, con importantes modificaciones en siglos posteriores, es la actual iglesia parroquial. Descripción, fotografías y vídeo.

Melide, ubicada a 450 metros de altitud, con sus poco más de 100 kilómetros cuadrados de extensión, sus 28 parroquias y sus  7.419 habitantes -censo de 2020- es considerada como el centro geográfico de Galicia. Situada en la encrucijada de los Caminos de Santiago, en el centro de la villa se cruzan el Camino Primitivo, conocido aquí como de Oviedo, y el Francés.

Melide, encrucijada de Caminos de Santiago.

Aparece documentada por primera vez en el siglo X, aunque sus orígenes pueden ser muy anteriores. El Camino de Santiago es su fundamento como pueblo y posee una intensa identidad histórica jacobea. Su centro medieval fue repoblado por mandato de Alfonso IX, que concedió la Terra de Melide al arzobispo de Santiago en 1212.

Camino de Santiago.

Cuente con un importante patrimonio religioso. Del mandato de Alfonso IX se conserva la portada de la iglesia románica de San Pedro, integrada en la actual capilla de San Roque. Al lado de la capilla se levanta uno de los cruceiros más antiguos de Galicia, obra gótica del siglo XIV, que muestra la larga pervivencia del estilo del maestro Mateo en el área de influencia del Camino.

En el centro de villa, se encuentra la pétrea plaza do Convento, con la iglesia del convento de Sancti Spiritus, la capilla de Santo Antonio, la casa del Ayuntamiento y el actual Museo de la Terra de Melide, antiguo hospital de peregrinos.

La iglesia de Sancti Spiritus perteneció al desaparecido convento de los Franciscanos Tercianos –Orden Tercera de San Francisco- fundado en el año 1375, es uno de los tesoros del patrimonio melidense, con importantes modificaciones posteriores es en la actualidad la iglesia parroquial de la localidad. En 1498, Sancho Sánchez de Ulloa con la piedra del castillo derribado durante la revuelta irmandiña, decide reconstruir la iglesia del convento en memoria de su madre Inés de Castro. En el siglo XVIII se realizan reformas de ampliación en la iglesia, quedando únicamente  la capilla lateral y la mayor de los siglos XIV y XV. Se amplia la nave con la construcción de una de cañón, que se reparte en cuatro trechos separados por arcos fajones que arrancan de ménsulas conectadas por arcos entre si. Así como la portada principal, en tres tramos que está en un lateral hacia la plaza, y que tiene características del barroco compostelano de esa época.





También del siglo XVIII es la torre cuadrangular, con ligeros contrafuertes y remate en cúpula octavada con pináculo y vanos para las campanas. Su perfil es semejante a las de San Francisco en Santiago de Compostela.     





En su interior destacan sus restos románicos. De la antigua iglesia sólo queda una pequeña capilla lateral, con bóveda y arco triunfal ojivales del siglo XIV, llamada capilla del Santo Cristo, porque tal vez estuvo en ella el Cristo que hoy está en la capilla de San Antón. 







En su capilla mayor se encuentra el retablo barroco obra del gallego Francisco de Castro Canseco en 1760. El cuerpo principal presenta en el centro una hornacina de arco de medio punto, flanqueada por columnas salomónicas con decoración de racimos y hojas, representación del relato de Pentecostés, el escudo de la orden franciscana e imágenes de San Francisco y Santo Domingo, presidiendo la Inmaculada. Sobre el suelo del retablo aparece la tumba medieval de Fernán Lopes, fundador do convento.






En su lateral se encuentran los sarcófagos góticos del siglo XV de Leonor de Mendoza e Inés de Castro, primera y segunda mujer de Lope Sanches de Ulloa, erguidos con columnas y arcos de medio punto adornados con pináculos y arco conopial. Visten el hábito franciscano, con rosario en las manos y paños formando grandes pliegues, con inscripciones genealógicas en su frente.







La iglesia cuenta con otros dos retablos, de estilo neoclásico, dedicados a la Virgen de los Dolores y a Jesús el Nazareno con el sepulcro de Alfonso Vázquez de Insua.






Destacable es la talla en marfil de un Niño Jesús, datado en el siglo XVII, de estilo hispano-filipino, que otrora estaba en la capilla y obra pía de San Antonio, construida en 1671 por el otrora arzobispo de Méjico, Mateo Segade Bugueiro. Capilla de donde procede también la conocida como Verónica de Melide, que se atribuye al mencionado Francisco de Castro Canseco. Y varios cuadros pintados en tela, como el de la Virgen de Guadalupe, que muestra el paso por tierras mejicanas del ilustre melidense.

Capilla y obra pía de San Antonio, el arte azteca en Melide.




 

   



OBSERVACIONES.

Enlace al vídeo sobre la iglesia: 

https://www.youtube.com/watch?v=WY_0G7t8ls0




MÁS INFORMACIÓN COMPLEMENTARIA. Pinchar en enlaces.

Camino de Santiago.

Camino de Santiago Primitivo.

Camino de Santiago Primitivo. Etapa nº 12 de Villamor a Arzúa.

Camino de Santiago Primitivo. Etapa nº 12 de Villamor a Arzúa. Vídeo del recorrido.

Capilla y obra pía de San Antonio, el arte azteca en Melide.

Iglesia de Sancti Spiritus, testigo de la historia de Melide.

Melide, encrucijada de Caminos de Santiago.


 

 "Hacer el Camino más allá de la belleza de sus paisajes, su energía, su espiritualidad, la cordialidad y hospitalidad de los gallegos, nos permite descubrir toda esa fuerza interior que todos tenemos, abrir nuestra mente y nuestro corazón a iniciar el camino hacia una mejor calidad de vida". Teresa Márquez, peregrina.

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