Ubicada en el extremo noreste de la
provincia de León, perteneciente al municipio de Oseja, la parroquia y
localidad de Soto de Sajambre, integrada en el Parque Nacional de los Picos de
Europa, cuenta entre su extensión con la idílica majada de Vegabaño.
El acceso a Soto se realiza desde la
carretera N-625 que une Cangas de Onís, en el Principado de Asturias, con el
puerto del Pontón, para abandonar la misma a unos 3 kilómetros de Oseja de
Sajambre, la capital municipal, y ascender a la vera del río Agüera durante 4
kilómetros hasta la localidad por la carretera LE-2708, ubicada a 930 metros de
altitud, dónde concluye la carretera.
Para el acceso a la majada hay dos
opciones. Una atravesando un bosque de hayas por pistas y senderos, recorriendo
una distancia de cerca de 3 kilómetros. Y otra a través de la pista que
saliendo del pueblo concluye en la misma salvando una distancia de 7
kilómetros.
La primera opción se realiza desde la
zona alta de Soto, tras cruzar el río Agüera y dejando la fuente, el lavadero y
el potro de herrar.
El camino es una pista primero y camino
después, que pasa por delante de los depósitos de agua y de los pastizales de
la zona superior del pueblo.
Hasta internarse en un imponente bosque
de hayas centenarias, salvando por un rústico puente el río que vértebra Soto.
El bosque tiene diferentes senderos de mayor o menor anchura, con alguna cabaña
diseminada en su interior.
Por su zona alta se accede a la pista,
que también parte de Soto, desde la casa conocida como de los “tiros”, antigua
propiedad de Félix de Martino Díez, el benefactor e hijo ilustre de la
localidad.
Pista que recorre una distancia de 7
kilómetros y que concluye en la majada, no estando permitido su uso para
vehículos sin permiso.
Por la pista queda recorrer una
distancia de aproximadamente 1 kilómetro para acceder a la majada de Vegabaño,
sita a 1432 metros de altitud.
Otros accesos posibles son desde el
puerto de Panderrueda y los pueblos de los valles de Valdeón, como Posada, Soto
o Calvilla a través del camino del puerto de Dobres, también por la vega de
Llos y el collado del Frade.
La majada, en la que se han hecho
diferentes excavaciones desenterrando monumentos megalíticos, es una amplia
pradera herbosa delimitada por un tupido bosque, enmarcada con el fondo de
parte de las montañas del macizo occidental de los Picos de Europa, y a píe de
la peña Breza.
En ella se ubican seis cabañas en buen
estado y una derruida.
Contando también con un refugio, en su
extremo norte, que forma parte de los refugios que componen el grupo de
“Anillos de los Picos”, y que cuenta con diferentes actividades organizadas.
Refugio que tiene por detrás la riega Tavegano, afluente del Dobra.
Vegabaño es un paraje incomparable, que
cuenta con todo el encanto que da un sitio idílico por su flora, fauna y
vegetación, situada en uno de los corazones del macizo occidental de los Picos
de Europa.
Siendo el lugar perfecto para realizar
actividades de senderismo y montaña, pudiendo realizarse –entre otras-
ascensiones a la peña Breza, pico Jario, la cotorra de Escobaño o el Cabronero.
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INFORAMCIÓN. Pinchar en enlaces.
“El
montañero debe pensar, orientarse, escoger; el turista sólo sigue señales”.
Lorenzo Arribas, escritor.
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