lunes, 21 de noviembre de 2016

Jornadas de la matanza en Puebla de Lillo. XX edición, 2016.

Celebradas el 19 y 20 de noviembre de 2016.


Puebla de Lillo es un municipio del en el norte de la provincia de León, lindante con el Principado de Asturias, que cuenta con carta Puebla desde 1212 otorgada por Alfonso IX de León.  Ubicado a una altitud media de 1.100 metros, su superficie es de 171 kilómetros y su población de 715 habitantes –censo de 2015-.
Municipio eminentemente ganadero, en él se celebran ferias de ganados y tiene en la matanza del cerdo una de sus tradiciones más populares y arraigadas, celebrando a mitad de noviembre unas consolidadas “Jornadas de la Matanza”, complementadas con las paralelas “Feria multisectorial de esquí y ocio de montaña” y la “Feria de vacuno y equino”.
San Martín, cuya festividad es el 11 de noviembre, es sinónimo de matanza del cerdo. Y con estas Jornadas y ferias, de las que se han celebrado los días 19 y 20 de noviembre de 2016 su vigésima edición,







Lillo, de esta forma, homenajea y exalta al cerdo, a su matanza y a sus productos, a la vez que mantiene una tradición ancestral asociada a la necesidad de una despensa bien abastecida para el largo y duro invierno.
Antaño en torno a la matanza había ciertas costumbres y rituales, muchas relacionadas con las fases lunares, en desuso o desaparecidas, pero lo que no lo está es el carácter familiar y vecinal de la misma, con amplía presencia de unos y otros participando en la misma.
La matanza de Lillo, por un lado, respeta en parte la tradición de su ejecución y despiece, haciendo parcial este último y subastando al gorrino a continuación. Subasta en la que en la veinteava edición se pujó hasta los 380 euros por los 160 kilos que pesaba en canal por el marrano.











Y por el otro, se mantiene vivo su carácter familiar y vecinal, aunque adaptado a los nuevos tiempos, en el que las reuniones no son para ayudar físicamente sino para el disfrute de la ingesta de los productos que de él se obtienen, como realizan un buen número de vecinos y visitantes con motivo de las Jornadas que organiza el Ayuntamiento.
La matanza se realiza en el exterior del recinto ferial, con la subasta en el interior del mismo, que también alberga los diferentes puestos que conforman la feria multisectorial.






Feria que cuenta con puestos de venta de ropa deportiva, regalos, artesanía, aguardientes,  pastelería, quesos y otros. 






Y en la que la corporación agasaja a los presentes con la parva, degustación de pasas y mistela o aguardiente.






El grupo “Los amigos de la matanza”, que lidera José Antonio Miyar –Toño-, da buena fe del carácter de confraternidad en torno a la tradición ancestral, acudiendo de forma continuada a las mismas desde la tercera edición de las Jornadas, de las que son unos auténticos dinamizadores.






Toño, enamorado de una comarca con la que está unido desde su más tierna infancia, coordina a un variopinto Grupo que disfruta de la amistad, convivencia y de la excelsa gastronomía. 




Compuesto por asturianos, en su gran parte, que crece año tras año y que en la vigésima edición estuvo compuesto por 39 miembros, que se desplazaron hasta la montaña leonesa para disfrutar de la larga jornada festiva, el sábado día 19.






La visita al recinto ferial, el alterne por los bares de la localidad –Mirasierra, la Corte y la ruta del Porma- y la comida en el hotel restaurante Madrid, componían el programa diseñado. Restaurante, este último que junto a casa Federico, las Nieves, la Mina y la ruta del Porma, componían la oferta de establecimientos en los que era posible degustar las Jornadas.
Coincidiendo antes de la comida con los miembros de la corporación polesa, entregando simbólicamente Toño al alcalde – Pedro Vicente Sánchez- la mascota del Grupo de la edición, que posteriormente se quedaría en el restaurante en el que se celebró la comida.








Contundente comida compuesta por siete platos: morcilla, picadillo, patatas con costilla, lomo, manos y morro, rabo y oreja y flan y leche frita; que junto a los vinos de la DOP Tierra de León, el café de puchero y el chupito de orujo, componía la oferta que la restauración local realizaba de forma conjunta.












Como es su costumbre, en la sobremesa, el Grupo realizó un reconocimiento a personas del entorno, siendo Cloti y Néstor, matrimonio de la localidad, los agasajados en la velada, sumándose a la misma en ese momento los miembros de la corporación, y dirigiendo el alcalde una salutación a los comensales.






Néstor recibió la placa, cuyo texto leyó emocionado: “A Néstor y Cloti, en agradecimiento a su cariño y hospitalidad en las jornadas de la matanza de Puebla de Lillo. Vivir consiste en construir futuros recuerdos, gracias por ayudarnos a construir los nuestros y hacernos disfrutar de “Lillo es Vida” en todo su esplendor. Los Amigos de la Matanza, en Puebla de Lillo, a 19 de noviembre de 2016”. Mientras una orgullosa Cloti recibía un vistoso ramo de flores.










Animada sobremesa que puso colofón a la grata experiencia vivida con este peculiar Grupo, unido por la convivencia de sus miembros, algunos de ellos en segunda generación, de la que hemos podido disfrutar por primera vez gracias a la gentil invitación de sus promotores, Gema y Toño. Gracias por hacernos participes de la velada, enhorabuena a la hostelería de Puebla de Lillo y larga vida al grupo: "Los amigos de la matanza".



MÁS INFORMACIÓN. Pinchar en enlaces.




“Tres días hay en el año, que se llena bien la panza, Nochebuena, Nochevieja y el día de la matanza”. Refrán castellano.

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