lunes, 5 de agosto de 2013

Sesión en honor a Jesús Saenz de Miera en la Real Academia de Medicina del Principado de Asturias.

La Real Academia de Medicina del Principado de Asturias, homenajeo a uno de sus mecenas y académico de honor: Jesús Sáenz de Miera.

El 21 de septiembre de 2012 el Principado de Asturias perdió a uno de sus más insignes personalidades del siglo XX y principios del XXI, fallecía a los 92 años de edad Jesús Sáenz de Miera y Zapico, el hombre que convirtió las pequeñas explotaciones ganaderas del campo asturiano en la empresa líder del sector lácteo español, al fundador de la Central Lechera Asturiana (CLAS).
Casi 9 nueve meses después, el 13 de junio de 2013, la Real Academia de Medicina del Principado de Asturias, le ha rendido un sentido homenaje a título póstumo con una sesión en honor y memoria de Jesús, reconociendo al mecenas que siempre tuvo en su persona y en la empresa por él liderada.
Sesión emotiva que contó con una mesa presidencial compuesta por personalidades que no escatimaron elogios en sus emotivas intervenciones a una figura a los que les unían lazos de muchos años, en algunos casos profesionales, en otras de amistad y en otras familiares. Mesa presidida por Manuel Álvarez-Uría Rico-Villademoros, presidente de la Real Academia y compuesta por los académicos: José Aza González, Adolfo Barthe Aza, Jaime Martínez y Dionisio Cifuentes, el presidente de CLAS Bertino Velasco y Andrés López como representante de la familia.
 
 
  De izquierda a derecha: Andrés, Dionisio, Bertino, Manuel, José, Adolfo y Jaime.
 
Las intervenciones de Adolfo, Dionisio, Bertino y Andrés, precedieron al cierre realizado por el amigo Manolo Álvarez-Uría, que tan eficientemente preside desde el año 2006 la Real Academia, constituida oficialmente en el año 1973 como Real Academia de Medicina de Asturias y León al ser las dos provincias que componían el distrito universitario en aquellos momentos, para constituirse en Real Academia del Principado de Asturias en el año 1988.
Adolfo Barthe, tesorero de la Academia, fue el encargado de glosar la figura de este leonés de nacimiento –Valencia de Don Juan, 1920- pero asturiano de adopción. Dionisio hablo de su faceta social y humana, al que conocía bien por ser compañeros en la Cofradía de Amigos de los Quesos del Principado de Asturias, al igual que Adolfo, Manolo y el que suscribe. Bertino resalto su impecable trayectoria personal y la figura empresarial de una persona que siempre recordara el campo asturiano, al presidente de honor de CLAS y CAPSA, al que tanto deben y a los que prometió mantener “un vínculo eterno porque nací para serviros”. Jesús no tuvo hijos, y Adolfo como sobrino hablo en nombre de su esposa Caridad López Fernández-Nespral, conocida por todos como Cari, y de su familia, resaltando su faceta humana y agradeciendo la organización del acto.
 
 
Adolfo en su intervención.
 
Manolo Uría en la clausura de la sesión en honor y memoria de Jesús, recalco sus virtudes humanas, familiares y profesionales, a la vez que agradecía públicamente el patronazgo que realizo a través de la empresa por el liderada de los “Premios internacionales Hipócrates de investigación médica sobre nutrición humana”, creados en el año 2005, y con el que la Real Academia de Medicina del Principado de Asturias reconoce la labor realizada por profesionales o instituciones comprometidos en establecer diferentes cuestiones relacionadas con la nutrición humana.
 
 
Jesús –a la derecha- junto al profesor Daniel Ramón Vidal, en la entrega del premio de la edición 2008. Fondo de pantalla de la sesión.
  
Jesús fue un hombre involucrado desde su juventud en las estructuras políticas, sindicales e ideológicas del franquismo, en 1942 opositó  al Cuerpo Nacional de Policía y fue destinado ese mismo año, con 22 años, a la comisaría de Oviedo como agente del Servicio de Información. Licenciado y doctor en Derecho por la Universidad de Oviedo,  se involucró en las estructuras del régimen franquista, tanto en el Sindicato Vertical -fue presidente del Sindicato Oficial de la Madera en la región y de la Cámara Sindical Agraria- como en sus instituciones de representación política siendo procurador de las Cortes entre 1958 y 1971 y participando como ponente en la redacción de la Ley Sindical del 71.
En 1966 alentó el nacimiento de Central Lechera Asturiana, para canalizar el descontento del campesinado asturiano, apoyando desde la Cámara Oficial Sindical Agraria de Asturias la rebelión colectiva, la llamada “huelga de la leche”, un movimiento de protesta programado al margen de los conductos tolerados por el régimen contra las principales compañías lácteas privadas de la región cuando sus consejos de administración impusieron una rebaja del precio de la materia prima.
Su intención fue reconducirlo hacia un proyecto empresarial que permitiera a los ganaderos (12.000 se adhirieron al proyecto) ser industriales y transformadores de su propia materia prima para competir con los poderosos grupos lácteos privados nacionales y extranjeros implantados en Asturias, y en ella Jesús  vio la posibilidad de prestar un servicio más al franquismo pacificando el campo asturiano y la oportunidad de plasmar en un proyecto corporativo su ideario político joseantoniano (con su retórica anticapitalista), su concepción social (inspirada por la doctrina social de la Iglesia) y su visión sindical, emanada del estudio de los movimientos sindicales católicos belgas y de las organizaciones cooperativas primigenias de Reino Unido. CLAS, que nació como una organización de espíritu cooperativo, jamás adoptó esta figura jurídica y societaria, que Sáenz de Miera rechazó por temor a sus posibles connotaciones socialistas, y optó por la fórmula del grupo sindical de colonización, una idea concebida por la dictadura en 1941 y que perduró hasta que la legislación democrática habilitó en 1981 la nueva figura societaria de la sociedad agraria de transformación (SAT), con la que actualmente opera Central Lechera Asturiana, de la que fue presidente desde su fundación hasta el año 2009, en el que paso a ser su presidente de honor.
Estaba en posesión de numerosas distinciones: “Caballero de la Orden Sencilla de la Imperial del Yugo y las Flechas”, “Comendador de número de la Orden del Mérito Agrícola”, “Caballero Gran Cruz de la Orden del Mérito Agrícola”, “Caballero de la Orden Agrícola de la República Francesa”, “Mejor empresario de Asturias 1992”, “Ovetense del Año”, “Hijo predilecto de Valencia de Don Juan”, “Medalla de Oro del Ayuntamiento de Siero”, su nombre figura con todo merecimiento en el nomenclátor de las calles de Oviedo desde el año 2005. A nivel de Cofradías Gastronómicas era senador de la Cofradía de Amigos de los Quesos del Principado de Asturias y Caballero Honorable de la Cofradía Doña Gontrodo de Oviedo, la única española compuesta únicamente por mujeres.



María Luisa Llavona, presidenta de la Cofradía Doña Gontrodo, entregándole en octubre de 2010 la distinción como Caballero Honorable.


 
A Jesús tuve el placer de conocerlo en el año 1992 por motivos profesionales, y compartí mesa y mantel en muchas ocasiones desde el año 1997 como cofrades de la Cofradía de Amigos de los Quesos del Principado de Asturias, de la qué el además era Senador, lo que facilito consolidar una relación que se mantuvo hasta sus últimos días, aunque ya a través de su esposa Cari. Vaya desde aquí mi también pequeño homenaje a una persona que siempre tuve como referencia, tanto a nivel humano como profesional,  que entiendo nunca se valoró como se ha merecido en el Principado de Asturias y que bien merece estar en posesión en una de las medallas que otorga el Gobierno del Principado de Asturias, aunque sea a título póstumo. Descansa en paz amigo Jesús.
 
“No aceptéis lo habitual como una cosa natural. Porque el tiempo de desorden y confusión organizada, de humanidad deshumanizada, nada debe parecer natural, nada debe parecer imposible de cambiar”. Bertold Brecht (1898-1956) poeta y dramaturgo alemán.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario