Festival gastronómico de La Rioja en Oviedo. VII edición, 25 de febrero de 2012.

Celebrado en la plaza de Trascorrales de Oviedo, organizado por el Centro Riojano de Asturias.

El sábado 25 de febrero de 2012, los inquietos riojanos del Centro Riojano de Asturias celebraron un año más, y ya son siete, uno de los dos festivales gastronómicos que organizan al año, con productos regionales de su tierra. El celebrado es la “caparronda”, el otro es la de la “chuletada” que hacen a finales de la primavera en Gijón.

Las actividades del Centro no se centran solamente en estas jornadas, organizan el mercado tradicional de productos de la Rioja en Asturias, conferencias, excursiones y viajes, además de disponer de un céntrico local, que sirve para reunirse y celebrar eventos varios.

Al festival hemos tenido a bien acudir por segunda ocasión, atendiendo la atenta invitación de su presidente Julián Ruiz-Cantabrana, y disfrutar de la calidad de los productos de esa querida Comunidad, traídos directamente desde la misma para la ocasión. Muchos socios del Centro, ya conocidos de mis asistencias a sus actos, y algunos invitados nos dimos cita a la llamada del amigo Julián, juntándonos casi un centenar de personas ante las viandas riojanas.

Por cortesía de Julián, le hemos acompañado mi esposa Estela y el que suscribe en la mesa presidencial, junto a José Ramón Pando, concejal delegado de turismo y congresos, parques y jardines y relaciones institucionales del Excmo Ayuntamiento de Oviedo, a Fernando Aldea, ex jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Asturias, actualmente en la Reserva y de su esposa Araceli y de Julián y su esposa Esperanza. Estupendos compañeros, viejos conocidos excepto José Ramón, para una estupenda comida.

De derecha a izquierda: Julián, José Ramón, el que suscribe y Fernando. 

Esperanza en el centro escoltada por Araceli a su izquierda y Estela a su derecha. 

Una vez sentados todos los comensales, Julián se dirigió a todos, dio la bienvenida, explico en que iba a consistir la comida y solicitó un minuto de silencio por Alfredo Medina y Miguel Esparza, socios activos del Centro que han fallecido recientemente, y para los que  tuvo unas cariñosas palabras de recuerdo.

La comida que contó con el servicio del personal de Casa Ovidio, de Corvera, fue elaborada como en anteriores ediciones por el socio Tomás Sanchis, estando el postre de cargo de Modesta, igualmente socia del Centro.

Julián dando instrucciones a Ovidio, ante la mirada de Tomás, el cocinero mayor del Centro.

Queso de oveja curado de Haro, chorizo y salchichón, morcilla riojana con pimientos, pimientos del piquillo rellenos de anchoas y bacalao macerado en aceite fueron las entradas con las que nos deleitaron y que dieron paso a la protagonista de la jornada, la caparronada de Anguiano con su compango, para finalizar con los fardaleyos elaborados por Modesta. El vino fue un rioja de la colección privada del Centro, y el café y el pacharan de Las Endrinas completaron el menú. Todo excepto el pan y el agua, procedente de La Rioja, como bien nos recordaba Esperanza y Julián.

Los caparrones son unas alubias rojas, muy típicas de la localidad riojana de Anguiano, en donde se celebra a mediados de cada mes de noviembre una edición de exaltación a la misma, pero que también es muy popular en otras zonas de La Rioja, Soria y Burgos. Su mayor consumo tiene lugar en los fríos meses de invierno, y se enriquecen con el compango del cerdo, en ellas no pueden faltar los chorizos, el tocino, la panceta, las manos y las orejas del animal, formando todo ello un plato contundente y sabroso. Para su degustación se suelen acompañar de guindillas verdes en vinagre.

La elaboración de Tomás estaba perfecta, con una alubia en su punto de cocción y un excelente compango y que con el complemento de las guindillas hicieron las delicias de todos nosotros.

Los fardalejos, por su parte, es un postre típico de muchas localidades riojanas, pero quizás sea en Arnedo dónde más se le venera. Se trata de un hojaldre frito relleno de almendras, huevos y azúcar, relleno similar al mazapán, cuya procedencia parece ser árabe, y cuya producción ya esta documentada en los siglos IX y X. No recuerdo haberlos degustado anteriormente y me han encantado.

Bien entrada la tarde, y después de una muy agradable sobremesa con contertulios de lujo, dimos por finalizada la jornada de exaltación de los productos riojanos, que sirvió para confraternizar una vez más los muchos riojanos que tienen en nuestro Principado su residencia, pero que no olvidan su tierra y sus productos.

Gracias Esperanza y Julián por vuestras continuas invitaciones, reiterar mis felicitaciones a Tomás y a Modesta por sus elaboraciones, y a todos los miembros del Centro Riojano por ser tan activos y mostrarnos los muchos encantos que tienen en su tierra.

“Las cosas son como son, porque fueron como fueron”. Hoyle Fred (1915) astrofísico y matemático británico.