domingo, 11 de febrero de 2018

Basílica del Pilar, en Zaragoza.


El mayor templo barroco de España y primer foco mariano de la Cristiandad, es el monumento más visitado del país.


Zaragoza, ciudad, municipio y capital de la Comunidad Autónoma de Aragón, situada a 208 metros de altitud, cuenta con una extensión de 974 kilómetros cuadrados y un censo poblacional de 698.978 habitantes –censo de 2017-, lo que la convierten en la quinta ciudad más poblada de España.
Su privilegiada situación geográfica, la convierten en un importe nudo de comunicaciones, siendo históricamente una encrucijada de caminos y culturas, que la ha condicionado y moldeado desde que los primeros pobladores iberos se asentaran en ella. Asentamiento de todos los pueblos, que de una forma u otra, poblaron la península ibérica, y que dejaron su impronta en la ciudad, con muestras artísticas de primer orden.
Murallas romanas, palacios musulmanes y renacentistas, torres mudéjares, catedrales góticas y barrocas y recoletas plazas, son algunas referencias del amplio patrimonio civil y religioso de la bicentenaria capital aragonesa, primera ciudad del mundo en contar con dos Catedrales.
A orillas del río Ebro, que vértebra la ciudad, se alza la fisonomía inconfundible de la Basílica y Catedral del Pilar, ícono y orgulloso santo y seña del sentir zaragozano, y monumento más visitado de España.






Ubicada en la plaza de las Catedrales, conocida popularmente como del Pilar, compone con la Catedral de San Salvador, la Seo, esplendido conjunto ecléctico de estilos artísticos que abarcan del siglo XII al XVIII y la lonja de Mercaderes, del siglo XVI, entre ambas, la trilogía de monumentos referentes de la ciudad. Separados escasos metros en el lugar, donde según la tradición, se apareció la Virgen al apóstol Santiago sobre una pequeña columna o pilar el 2 de enero del año 40.





Sus torres, de 92 metros cada una, constituyen el emblema de la ciudad, visibles desde todas partes sus cúpulas señalan el primer foco mariano de la Cristiandad. Y que junto a los santuarios de Lourdes, Montserrat, Meritxell y Torreciudad, conforman la “Ruta mariana” guiada por la espiritualidad y devoción mariana.






El edificio actual fue diseñado en el año 1681, aunque no se acabo de concluir hasta mediados del siglo XX, que sustituyo al edifico gótico levantado en 1515, que a su vez reemplazó a la iglesia románica, arrasada por completo por un incendio.







Templo barroco de mayores dimensiones de España, de dimensiones enormes, airosas torres, tejos multicolores y austeros ladrillos, con planta de salón y tres naves de igual altura y bóvedas de cañón, cuya estructura gira en torno a la Santa Capilla, levantada para acoger el pilar donde, se habría aparecido la Virgen, que se venera en su parte posterior.








Capilla, cuyo altar recoge la venida de la Virgen ante el apóstol y los primeros convertidos,  en la que se exalta la figura de María con una gran variedad de imaginiería barroca, con esculturas y piezas realizadas en jaspe, mármol y bronce, realzados con la decoración pictórica de la cúpula.






Sobre el pilar de jaspe de 1,70 metros de altura y un diámetro de 24 centímetros, resguardado por plata y bronce, se alza la talla en madera de la Virgen, que solo mide 39 centímetros.





Pilar que se venera en su parte posterior.






Virgen que cada día del año luce un manto distinto, excepto los días 2, 12 y 20 de cada mes, que no se cubre con ninguno. El 2 por ser la fecha de aparición de la Virgen; el 12 por ser un 12 de octubre cuando se dedicó el templo y el 20 por el 20 de mayo, fecha de su coronación canónica, días que sí se cubre con manto.







El interior en su conjunto es un verdadero museo, con obras de gran interés artístico, a sumar a la Santa Capilla. Cuenta con frescos en bóvedas pintadas por Goya y su cuñado Francisco Bayeu; el retablo gótico del anterior templo, esculpido en alabastro en el siglo XVI por Damian Forment; el coro mayor con sillería de madera de Indias; el órgano y reja manierista; las capillas de las Santas Ana y Rosario y de los Santos Agustín, Antonio de Padua, Braulio, Joaquín, José, Juan Bautista, Lorenzo, Pedro Arbués y Santiago; y las sacristías Mayor y de la Virgen, complementado todo ello con el Museo Pilarista, que exhibe piezas artísticas y objetos donados a lo largo de los siglos.










Como curiosidad la Basílica de la patrona de Zaragoza, de la Hispanidad y de la Guardia Civil, entre otros cuerpos, fue bombardeada en agosto de 1936 durante la guerra civil española por un avión republicano. Cuatro fueron las bombas lanzadas, de las que una cayó en el río, otra en la plaza y dos en el interior del templo en el entorno de la Santa Capilla, no llegando a explotar ninguna. Quedando muestras en una de la cúpulas, estando expuestas las mismas en una columnas adosadas a la Capilla como recuerdo de la barbarie intentada.








Otra de las curiosidades es que en ella se rodó la primera película española de la historia, en 1898, titulada “Salida de la misa de doce de la iglesia del Pilar de Zaragoza”.








“La Virgen del Pilar dice que no quiere ser francesa, que quiere ser capitana de la tropa aragonesa”. Estrofa de la Joya, cantada por las tropas aragonesas durante la contienda de la Guerra de la Independencia contra los franceses.


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