Reunión ordinaria en la que hemos
disfrutado de la compañía de Esther Álvarez y José Luis López de la emblemática
quesería La Peral.
De vuelta de nuestro período
vacacional, la Cofradía vuelve a sus reuniones ordinarias mensuales cada primer
martes de mes. Y así el pasado cuatro de septiembre de 2012, a nuestra llegada al
Real Club de Tenis de Oviedo, nos damos cita de nuevo veinticuatro cofrades fieles
a la cita, con la grata sorpresa de que entre nosotros se encuentran como invitados
los amigos Esther y José Luis, de la Quesería La Peral, S.L. que nos acompañan
y nos presentan algunas de sus elaboraciones.
A pesar de que son viejos
conocidos por todos nosotros y grandes colaboradores de la Cofradía, es la
primera vez que nos acompañan desde al menos 1999, fecha en el que suscribe
ingresa en la misma. “Nunca es tarde si la dicha es buena” dice el refrán, que
en esta ocasión es de perfecta aplicación.
La reunión comienza con es
habitual, con el saludo de nuestro cofrade mayor –Dionisio Cifuentes- a todos
los presentes, para después de hacer mención a certámenes y eventos queseros
celebrados en los meses pasados, presentar a los productores del que es sin
duda el queso no tradicional más famoso de todos los que se elaboran en el Principado,
haciendo una pequeña reflexión sobre el mismo y mención a alguno de sus muchos
premios obtenidos y que ponen en valor su gran calidad, para concluir cediendo la
palabra a nuestra invitada.
Esther Álvarez Bango es el
cónyuge de José Luis López León, nieto de Antonio López Álvarez, fundador de la
quesería, del que heredo toda su ilusión, años de trabajo y experiencia.
Antonio llegó al pueblo de La Peral, en el concejo de Illas, en 1910 desde
Oviedo, para trabajar con su hermano y el socio de este en la quesería “La
Selva Asturiana” y allí falleció en 1986 a los 106 años de edad, siguiendo la
consolidación de la quesería que fundo en 1923, cuando emprendió su aventura en
solitario como empresario.
Mientras Pepe Luis como es conocido su marido, se encarga de la producción, Esther es la cara externa de la empresa familiar, a la que se han sumado ya hace unos años sus tres hijos, siendo uno de ellos -José Luis- quién la acompaño en nuestra reunión. Ellos ya forman la cuarta generación de una de las queserías artesanales más antiguas del Principado.
Esther nos recordó tiempos
pasados, cuando animo a su marido, que ejercía profesionalmente como soldador,
a hacerse cargo de la quesería que gestionaban los padres de este y cuya
producción se limita a procesar 125 litros de leche diaria. En su intervención
hizo especial hincapié, en lo que para ellos significó el años 1988, en el que
afrontan la construcción de la actual quesería, con más de 800 metros cuadrados
y con una inversión de 50.000.000 pesetas de las de entonces, muy superiores a
los 3.000.000 de pesetas que tenían ahorrados para hacer frente a la misma.
Como también lo hizo cuando recordó el empuje comercial que tuvo por aquellas
fechas el catalán Enric Canut, que les hizo un pedido de 8.500 kilos para y fue
un poco su trampolín de salida exterior. Valoro positivamente los múltiples
premios recibidos, en especial los obtenidos por el Peralzola, que en sus
cuatro años que se lleva elaborando ha obtenido un buen número importante de
renombre internacional.
Para la ocasión, fueron cuatro
los quesos seleccionados para degustar en la reunión por Esther y José Luis,
explicados de forma directa y amena por sus elaboradores, y que posteriormente
fueron ampliamente comentados entre todos los presentes.
Dos quesos de dos de las tres elaboraciones que comercializan, ambos de pasta azul y sin duda los más conocidos, Estrella La Peral y Peralzola, en sus dos versiones de queso menos curado y más curado. Su otra elaboración es el Peñoceo, queso de vaca tipo nata que comercializan en formato de barra (3 kilos) y bola (1 kilo) con una menor producción y clientes específicos, alguno de gran consumo.
De Estrella La Peral, elaborado
con leche entera y pasteurizada de vaca, y su queso con mayor demanda, que se
comercializa en formatos de 2.000, 800 y
400 gramos ,
más un tarro de crema de 200
gramos , nos presentó una elaboración de fecha 19-07-2012
y otra de 20-06-2012. Mientras que del Peralzola, elaborado con leche
pasteurizada de oveja, y comercializado en formatos de 2.000 y 800 gramos , nos presento
una elaboración de 25-04-2012 y otra de 27-07-2012.
Cuatro elaboraciones con matices
diferentes entre sí, que fueron del gusto de todos nosotros como quedo
demostrado en la rueda de intervenciones que tuvo lugar a continuación, y que
fueron maridados con una elaboración de una de las bodegas emblemáticas de la
Denominación de Origen Protegida Rioja, un reserva 2006 que la Bodega de los Herederos del Marqués de
Riscal, elabora en sus instalaciones de Elciego, que acompaño correctamente,
pero que no resalto los mismos.
Antes de concluir hubo tiempo para que nuestro cofrade superintendente, comunicará la entrega del prestigioso premio “Tierra Verde” que la ASPET (Asociación Asturiana de Periodistas y Escritores de Turismo) entregaremos a la Cofradía, galardonada con su edición 2011, el próximo día 27 de septiembre en el Centro Asturiano de Oviedo. Así como del viaje a Ciudad Real, el 20 de octubre, a la celebración del Gran Capítulo de la Cofradía del Queso Manchego, en el que ambas cofradías se hermanarán y de la invitación cursada por la Hermandad de la Probe de La Foz de Morcín, para el día 9 de septiembre, en la que con motivo de la celebración de su “Feria de los quesos artesanos de Asturias” a los cofrades que lo deseen formarán parte del jurado que nombre al mejor queso expuesto en la misma, y en la que Estrella La Peral fue elegido mejor queso de dicha feria en el año 2010, año en que se celebró el primer nombramiento, fruto de la colaboración entre la Hermandad y la Cofradía.
La reunión concluyó con la
entrega de un cuadro con el logo de la Cofradía a nuestros invitados, poniendo
así fin a una entrañable reunión, en la que hemos podido disfrutar de las
elaboraciones y sobre todo de la compañía de buenos amigos de nuestra
organización, que siempre han colaborado cuando fueron demandados y con los que
mantenemos exquisitas relaciones e incluso forman parte de nuestros viajes.
Esther y José Luis –a su derecha- en el momento de recibir el presente.
MÁS INFORMACIÓN.
«Los malentendidos y la negligencia crean más confusión en el mundo que el engaño y la maldad. En todo caso, estos dos últimos son mucho menos frecuentes.» Goethe.
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